::EL FOCO::

Por estos rumbos la drogadicción nunca había sido algo grave, a la fecha el asunto me tiene muy sin cuidado, el que se droga muy su pedo y muy su viaje. Lo más que me involucro en esta cuestión de las drogas es, meterme una que otra cuando la ocasión raramente lo amerita y no hay riesgos innecesarios, y otra es cuando un amigo anda valiendo madres por andar pasadote todo el tiempo y comienza a echar a perder su vida. No se cómo le llaman en otros lados a la piedra que cocinan a base de acido de batería y otras mamadas de esas, el resultado es esta piedra que expide un vapor que pone muy loco, aquí se le conoce como "Chucky". El caso es que también me vale madres esa droga que no pienso usar, pero me caga la plaga de robos de focos en el barrio, todo porque un foco es el artefacto ideal para quemar la piedra, yeah!!... un foco no dura dos noches en el barrio. Está de más decir que se han muerto ya varios pendejos y pendejas por el uso de esta droga, la pérdida de peso es inmediata y constante, un wey que no suelta esta chingadera puede morir en menos de dos semanas, así ya sucedió con un camarada de aquí a la vuelta. Tenía el cinismo (cuando estaba vivo, claro), cuando se le preguntaba cómo le hacía para bajar tanto de peso (era llenito), respondía: ¡ah, pos foco a foquito! ...
y se murió.